Establecimiento de metas realistas para el Año Nuevo

colocar metas realistas para el año nuevo

El establecimiento de metas realistas para el Año Nuevo no sólo es una manera de empezar el año con el pie derecho, sino una oportunidad para comprometernos con nuestro bienestar y crecimiento personal.

Comenzar un año nuevo nos invita, casi como una tradición milenaria, a reflexionar sobre nuestras metas y propósitos. Esta reflexión no sólo supone un recuento de lo que queremos alcanzar, sino un compromiso con nosotros mismos.

Sin embargo, para que este compromiso no se desvanezca antes de que el invierno termine, es crucial que las metas que nos planteamos sean realistas, alcanzables y medibles. A continuación, vamos a explorar cómo establecer objetivos que, más allá de ser un buen deseo, se conviertan en realidades tangibles.

¿Por qué es importante el establecimiento de metas realistas para el Año Nuevo?

Como si fueran brújulas, las metas funcionan guiando nuestras acciones y decisiones. Al tener un objetivo claro y una motivación, podemos trazar un camino y dedicar nuestros esfuerzos en esa dirección.

Sin embargo, cuando las metas son demasiado ambiciosas o difusas, y la motivación para ‘hacer’ no e la adecuada, corremos el riesgo de sentirnos abrumados, frustrados, hasta acabamos volviéndonos apáticos. Es necesario que la colocación de metas realistas para el Año nuevo o para cualquier celebración esté correctamente vislumbrada, prevista, planificada. Así como es importante que podamos pre-saborear emocionalmente hablando el placer de su alcance.

Metas realistas para el año nuevo

Las ventajas de la realidad

Establecer metas realistas y medibles para el Año Nuevo nos brinda varias ventajas:

  • Motivación sostenida: Al ver progresos y pequeños logros, nos sentimos motivados a continuar.
  • Foco: Nos ayuda a priorizar y distinguir lo esencial de lo secundario.
  • Menor frustración: Al alcanzar objetivos realistas, se reduce la posibilidad de desilusión.
  • Autoconocimiento y autoeficacia: Reconocemos nuestras capacidades y limitaciones.

Características de las metas realistas para el Año Nuevo

El inicio del Año Nuevo es un momento en el que muchas personas deciden establecer metas y objetivos para el año que viene. Ya sea en el ámbito profesional, personal o de salud, es esencial que estas metas sean realistas para garantizar su éxito.

A continuación, se presentan las características que deberían tener las metas realistas, aplicable a casi todo lo que se quiera realizar, y cómo pueden ayudarte a lograr tus propósitos.

Te puede interesar: Promover la autocompasión en el Año Nuevo

1. Especificidad

La delimitación de cualquier objetivo es en extremo necesaria si no se quiere perder energías innecesariamente.

Definición Clara

Una meta realista debe estar claramente definida. En lugar de decir «Quiero perder peso», sería más apropiado especificar «Quiero perder 5 kilos en tres meses». Esta definición te da las claves para tomar una dirección acertada y te permite fijar tu objetivo.

Medible

Pregúntate: «¿Cómo sabré cuando haya alcanzado mi meta?». Si es posible al medir el objetivo final que te propones y aquellos intermedios a lo largo del proceso, podrás hacer un escaneo de tu progreso y ajustarlo si tuvieras que hacerlo.

2. Alcanzable

Aunque pretendas querer abarcar mucho y satisfacer la demanda de los otros, lo mejor del establecimiento de metas realistas es que pueden sincerar su alcance.

Basado en tus recursos

Asegúrate de que cuentas con los recursos necesarios para lograr tu objetivo. Si tu meta es aprender un nuevo idioma, por ejemplo, necesitarás tiempo, materiales y, posiblemente, un tutor o una plataforma de aprendizaje.

Consideración de obstáculos

Es fundamental ser consciente de los posibles obstáculos que puedas encontrar en el camino y pensar en cómo los superarás. Esto te permitirá estar preparado y no desanimarte si surgen contratiempos.

3. Relevante

Si la fijación de metas realistas para el Año Nuevo es del todo relevante, habrá ocasiones en que tendrás que sentarte a valorar ciertas prioridades y ordenar una escala jerárquica y temporal.

Alineado con tus valores

Asegúrate de que tus metas estén alineadas con lo que es importante para ti y con lo que verdaderamente deseas en tu vida. Esto te dará la motivación necesaria para seguir adelante.

Beneficio a largo plazo

Es útil que tus objetivos tengan un impacto significativo en tu vida a largo plazo (sin descuidar aquellos a corto plazo). Al considerar las repercusiones a largo plazo de tus metas, es más probable que te mantengas comprometido con ellas.

Tiempo definido

La celebración del Año Nuevo representa una fecha que se superpone a cualquiera otra festividad. Sin embargo, hay otras ocasiones cuya elaboración y preparación generan un nivel alto de estrés.

Plazos establecidos

Cada meta debería tener un plazo claro. Esto crea un sentido de urgencia, de necesidad y impulsa a actuar. Sin un marco temporal, la procrastinación puede ser una amenaza real.

Revisiones periódicas

Establece momentos específicos para revisar y evaluar tu progreso. Esto te permite hacer ajustes en tu plan y asegurarte de que estás en el camino correcto.

Pasos para establecer metas realistas para el Año Nuevo

Toma en cuenta que, al establecer metas realistas para el Año Nuevo, es fundamental que sean específicas, medibles, alcanzables, relevantes y con un tiempo definido. Considera estas características al planificar tus objetivos, y aumentarás considerablemente tus posibilidades de éxito.  

Año nuevo, nuevas metas

Te puede interesar: Resiliencia emocional: Cómo encontrar fortaleza interior en situaciones difíciles

1. Reflexión personal

Haz un inventario de tus deseos, necesidades y capacidades actuales. Esto te ayudará a discernir lo que realmente quieres lograr para mejorar tu vida y lo que es viable.

2. Divide y vencerás

Descompone las metas grandes en submetas más pequeñas y manejables. Por ejemplo, si tu meta es «nadar 500 metros estilo mariposa este año», empieza por «nadar 100 metros sin parar en dos meses». En cuanto a actividades a realizar, la delegación de responsabilidades es también una excelente alternativa.

Escribir es comprometerse

Anota tus metas. El simple acto de escribir puede ser un poderoso recordatorio y compromiso con uno mismo. No es sólo la lista de presentes para los tuyos, es hacer un buen compendio de cosas que funcionarán para tu celebración o evento. Además al tener todo delante tuyo, ‘negro sobre blanco’, podrás tener menos confusión mental.

Revisa y ajusta

La vida es cambiante, y es posible que nuestras circunstancias o deseos varíen con el tiempo. Revisa tus metas periódicamente y no dudes en ajustarlas si es necesario. Si programas con tiempo, también tendrás oportunidad de hacer cambios pertinentes.

Celebrando los logros

Cada paso que nos acerca a nuestra meta merece ser celebrado. No subestimes los pequeños logros, pues son la suma de estos los que nos llevan a conquistar nuestros grandes objetivos. Tómate el tiempo para reconocer tu esfuerzo y disfrutar del proceso, es muy importante.

En el camino hacia nuestros objetivos, la constancia, el autoconocimiento y la celebración de nuestros logros serán nuestros aliados más valiosos. ¡Feliz Año Nuevo y a por esos objetivos realistas!

Deje una respuesta